¿Qué Espera el Hombre de la Máquina?, por Josefina Molfino

Josefina Molfino Maggi

Introducción

La interrogante nace a partir del escultor cinético Arthur Ganson y la investigación y estudio que se realizó. Este artista hace máquinas sin ninguna función específica y estos mecanismos traen lo lúdico y lo gestual al objeto, sin embargo, no son de gran utilidad para el hombre. Se basan simplemente en pensamientos e imaginación del autor para que el espectador pueda involucrarse en el tema, entenderlo y asombrarse.

“Creo que hay un punto entre la simplicidad y la ambigüedad que permite al observador quizás a tomar algo de ello, y eso me conduce a la idea de que todas las piezas comienzan en mi propia mente, en mi corazón y hago lo mejor posible por encontrar como expresarlas con materiales y siempre se sienten muy burdas. No significa nada en absoluto. Una vez que el objeto es percibido y alguien lo lleva a su propia mente es cuando hay un ciclo que se ha completado.”

(Arthur Ganson, Conferencia en TED).

El siguiente ensayo trata sobre qué espera el hombre de la máquina según su función. Este tema además, intentará contestar la pregunta planteada dirigida mayormente hacia un punto de vista de del estudiante de diseño tanto industrial como gráfico complementando así con una visión más integral.

Es por esta razón que se plantean las preguntas, y se desarrollan con ella otra serie de interrogantes, ¿Qué entendemos como concepto de máquina? ¿Qué es lo que realmente esperamos de ella?

Como otro punto de reflexión, entendemos que los diferentes tipos de máquinas se sitúan en contextos muy diferentes pero, ¿El arte con un tipo de mecanismo se podría llamar Máquina? ¿Una máquina - herramienta que nos facilita el trabajo es "más máquina" que una que sólo nos provoca admiración?

Para lograr comprender como diseñadores esta reflexión es necesario tener en cuenta el concepto de máquina y como ha ido evolucionando a través del tiempo. Además se necesita entender cada uno de estos conceptos a los cuales nos referimos, tanto una máquina – herramienta, como un mecanismo de fin estético, para luego aunarlos y sacar conclusiones sobre a qué estaríamos llamando máquina hoy en día.

Desarrollo

Según la Real Academia Española, una máquina es un aparato creado para aprovechar, regular o dirigir la acción de una fuerza. Estos dispositivos pueden recibir cierta forma de energía y transformarla en otra para generar un determinado efecto. Están formadas por conjuntos de elementos fijos o móviles, los cuales permiten realizar distintos tipos de trabajos a través de mecanismos.

Se comprende que desde tiempos remotos esta visión de máquina ha ido variando, y a pesar de que en la actualidad siguen habiendo disputas sobre este tema, y da para discutirlo, es notorio que ha variado y evolucionando mucho en cuanto al concepto y al uso de las nuevas máquinas y las nuevas tecnologías que se han presentado. Pero se necesita revisar y comprender la parte investigativa previamente para comprender el valor de esto.

Desde la prehistoria, la evolución tecnológica de las máquinas se ha basado en el binomio herramienta - máquina. Durante siglos , la herramienta fue la prolongación de la mano del hombre hasta la aparición de las primeras máquinas rudimentarias que ayudaron en su utilización. En la antigüedad no existieron máquinas - herramienta propiamente dichas, sin embargo, aparecieron dos esbozos de máquinas para realizar operaciones de torneado y taladrado. En ambos casos, utilizando una de las manos, era necesario crear un movimiento de rotación de la pieza en el torneado y de la herramienta en el taladrado. Debido a esta necesidad nació el llamado “arco de violín”, instrumento de accionamiento giratorio alternativo compuesto de un arco y una cuerda, utilizado desde hace miles de años hasta la actualidad en que todavía se utiliza de forma residual en algunos países. Hacia 1250 nació el torno de pedal y pértiga flexible accionado con el pie, representando un gran avance sobre al accionado con arco de violín puesto que permitía tener las manos libres para el manejo de la herramienta de torneado.

Desde un comienzo todas las máquinas se construían con una función específica, según las distintas necesidades del hombre. Por lo que se sabe, la primera definición que existe del término “máquina” es del libro décimo del tratado del mecánico romano Marcos de Vitruvio y dice:

“Las máquinas sirven solamente para el transporte de cargas. Dicho en otros términos son dispositivos tales, que para emplearlos, el hombre debe suministrar la fuerza motriz mediante la aplicación de su propia energía muscular.”

En este caso Marcos de Vitruvio tiene el concepto de máquina más antiguo e inicial, ya que los primeros años las máquinas fueron creadas por el solo hecho de facilitar el trabajo y hacer funciones que para el hombre era imposible o se le hacía difícil. Pero a pesar de que hoy en día este pensamiento aún se mantiene para algunos, que la máquina es simplemente algo funcional, el arte y el diseño ha logrado surgir y ha tomado partido para demostrar que con mecanismos, una escultura lúdica sí puede ser llamada máquina. Siguiendo con en análisis de evolución, en los comienzos de la sociedad capitalista, que se remonta al siglo XVI, se define que cada máquina se considera como algo independiente, totalmente nuevo y diferente de otras máquinas. Ésta definición se mantuvo hasta el siglo XVIII, donde se ignoraba también el conjunto de partes, que por separado constituyen hoy en día los mecanismos. En el mismo siglo XVIII, en el año 1724, el mecánico artesanal Leupold, parece haber sido el primer escritor que separó a los mecanismos simples de las máquinas. Leupold, analizó diferentes partes de las máquinas desde el punto de vista de la función, que le corresponde en la transformación del movimiento en otro. Esta postura puede ser comprendida por el hecho histórico de que la máquina se estudiaba como parte de la física en un sentido amplio. Por otro lado, en el año 1781, Gaspar Monge, inventor de la Geometría Descriptiva, demostró que las máquinas complejas pueden reducirse a un corto número de mecanismos simples y elementales, y logran seguir con su función principal, se cual sea la necesidad del hombre. En 1818, el francés Borguis aportó el esquema, que se haría universalmente conocido al considerar a las máquinas divididas en tres grandes grupos o partes: Las partes que reciben los esfuerzos (receptor de energía), las partes que los transmiten (el comunicador o transmisor) y las partes que realizan el trabajo definidas como herramientas. En 1875, el alemán Reuleaux publicó una teoría que constituye la médula y la base de la ciencia de las máquinas de esa época y dice que la máquina consta de una reunión de órganos o cuerpos resistentes, que a través de ella resulta posible hacer que las fuerzas mecánicas naturales ejecuten determinados trabajos. Y así se podría seguir hablando de diferentes conceptos y definiciones de máquinas, las cuales siempre llegan a un mismo punto en común: es una combinación de cuerpos resistentes de tal manera, que por medio de ellos, las fuerzas mecánicas de la naturaleza pueden encausar para realizar un trabajo acompañado de movimientos determinados en función de ayuda al hombre. La evolución muestra el cambio de pensamiento que se ha tenido con respecto a la máquina a lo largo de la historia, lo que permitirá formar una comparación entre ellos. Luego de haber revisado la evolución de la máquina en la historia, nos preguntamos ¿cuándo aparece el fin lúdico para un mecanismo?

Muchos de sus antecedentes manifiestan la influencia del ambiente tecnológico, en cuanto a la generación del movimiento en las obras, incrementando diferentes tipos de mecanismos para su funcionamiento. Algunos de estos mecanismos hacen de la obra de arte cinético una máquina, la cual busca la interacción entre el elemento y el espectador, con un fin lúdico y de gozo.

Entendemos por lúdico algo del juego o relacionado a el. Pero una máquina sería una escultura que no es inmóvil, sino que a través de mecanismos juega con la parte gráfica de la obra, y tiene momentos, movimientos y cambios a partir de un despliegue, y esto provoca un ASOMBRO en las personas.

Entonces, ¿qué espera el hombre de la máquina? ¿Herramienta o gestualidad?

En sus inicios, las máquinas fueron inventadas como una ayuda, para facilitar las tareas, como una prolongación de la mano del hombre. Cada día la máquina utilizada como herramienta se está haciendo más imprescindible en la vida del diseñador, tanto gráficos como industriales, ya que encuentra el punto mayor a la perfección, y puede realizar ciertas cosas que manualmente no se lograría de la misma forma, con la misma sutileza y precisión que aporta la máquina. Es importante recalcar que el diseñador, o estudiante de diseño, utiliza la industria y la tecnología como herramienta, no como sustitutos. Gracias a muchas de ellas se pueden crear los objetos diseñados, tal y como se piensan, y permiten además su producción en serie, ya que al ser algunas de ellas máquinas computarizadas, tienen la precisión exacta para lograr más de una pieza igual.

Por otro lado, la máquina lúdica es un arte que aporta un gozo, un asombro a la persona, pero no se vuelve algo indispensable para la vida del hombre y del diseñador. ¿Qué esperamos de este tipo de máquinas? La sorpresa. ¿Qué sería si la máquina con su mecanismo no creara ninguna reacción en mi? ¿Dónde estaría el fin lúdico si no gozo con ella?

Entonces se puede decir que una máquina es un concepto que esta inmerso en torno a la sorpresa en cuanto a movimientos y tiempos, sea funcional o estética.

La máquina tiene un fin específico, pero si no lo cumple, ¿Seguiría siendo llamada máquina? En muchos casos puede estar mal utilizado el concepto de máquina para nombrar un mecanismo, lo cual hace confundirnos y mezclar diferentes cosas. Como se menciona anteriormente, cuando se alude a Leupold que es la primera persona en separa ambos conceptos. Sin embargo, pienso que aún se tienden a confundir, y se nombra de manera errónea.

En el caso de Arthur Ganson, cada una de sus máquinas logra este asombro, este gozo al observarlas, por lo que como opinión personal estarían bien nombradas como máquinas ya que su fin es provocar algo en la persona, aunque no sea utilizado como una herramienta. Construye máquinas que no sirven a ningún propósito de la máquina. Como por ejemplo un abrazo, un gesto que evoca una respuesta emocional.

Conclusión

Se puede llamar máquina a ciertos mecanismos tanto lúdicos como con una función de herramienta. El hombre espera una cosa distinta de cada una de las máquinas. La máquina como herramienta es lo que el ser humano espera, como una facilitación del trabajo físico, pero de un mecanismo lúdico donde su fin es totalmente artístico, espera asombrarse y sensibilizarse en cuanto a la parte artística.

El arte cinético es uno de los movimientos que logró abrir las puertas del arte en cuanto a este tema, cambiar la visión y ligarlo a las máquinas, ya que gracias a su movimiento hay cosas que aparecen y desaparecen, se pliegan y se despliegan, y lo importante es que hay un cambio, una espera y un asombro en el espectador, entonces es aquí cuando el arte se incorpora en el concepto de máquina.

Cada tipo de máquina de las que hablamos tiene un fin completamente diferente. Dentro de los mecanismos que nombran como máquinas al arte cinético, el hombre espera un asombro en su despliegue. Que su fin de interacción y la parte lúdica se logre de la manera más sorpresiva posible, y que genere realmente este gozo en su observación. Esta forma del qué esperar de la máquina alude a un ámbito más psicológico, o filosófico, el cual no nos resulta indispensable para el oficio del diseñador, pero sí, conlleva todo un diseño en su creación. Si el mecanismo que estamos observando no genera lo mencionado anteriormente, en mi opinión, no podría ser nombrado como una máquina. La máquina hace algo que el hombre no puede hacer, o que le tomaría más tiempo. Eso es lo que produce este asombro sea el tipo de máquina que sea.

Referencias

  1. Ganson, A. (2004). Moving Sculpture. Marzo 2004, de TED Sitio web: https://www.ted.com/talks/arthur_ganson_makes_moving_sculpture

  2. www.definición.de

  3. Rondón, O. (2010). La Máquina moderna y su evolución histórica. Noviembre 04, 2010, de Casanchi Sitio web: http://casanchi.com/ref/histomaquina01.pdf

  4. Aldabaldetrecu, P. (2002). Evolución técnica de la máquina-herramienta. Febrero 01, 2002, de Revista Metalmecánica Sitio web: http://www.interempresas.net/MetalMecanica/Articulos/1435-Evolucion-tecnica-de-la-maquina-herramienta-Resena-historica.html

  5. www.masdearte.com

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